Los Equipos Técnicos de Inclusión Social (ETIS) del Ayuntamiento de Cuenca, fruto del convenio de colaboración con la Consejería de Bienestar Social de la Junta de Comunidades, han atendido en este año 2025 un total de 93 unidades familiares con 217 personas en situación de vulnerabilidad o exclusión social.
Se trata del acuerdo entre Junta y Ayuntamiento para la prestación de Servicios Sociales en Atención Primaria en el marco del Plan Concertado con inversión cofinanciada por el Fondo Social Europeo Plus 2021-2027 en el marco de la inclusión social y la lucha contra la pobreza y la exclusión social.
El objetivo de estos ETIS es realizar acciones complementarias a las intervenciones del equipo de trabajadoras sociales de Atención Primaria, concretamente el abordaje de situaciones de exclusión social que por su complejidad y singularidad requieren de un dispositivo específico de atención, así como de aquellas en las que se establezcan planes de intervención relacionados con medidas de protección de menores.
Todo ello se desarrolla a través de acciones de información, asesoramiento, orientación, formación en competencias socio-personales, mediación y acompañamiento a lo largo de todo el proceso de intervención enmarcado en itinerarios de inclusión desde el ámbito integral de la persona.
Cada uno de los dos equipos existentes está compuesto por tres profesionales del ámbito del Trabajo Social, la Educación Social y la Psicología, esta figura última incorporada a través del acuerdo formalizado con la asociación Acuaprende, abordándose situaciones de exclusión a través de estrategias de intervención individual, grupal y/o comunitaria inclusivas. Dichos equipos están ubicados en los centros sociales de Pozo de las Nieves y de Villa Román.
Con respecto a las personas atendidas en este ejercicio, cabe señalar que son, por un lado, personas en situación de vulnerabilidad estructural o riesgo de exclusión con déficit en los aspectos personales vinculados a las competencias y habilidades sociales, a los dinamismos vitales, a la salud-dependencia-discapacidad, a la formación, con escasez económica, dificultad en el acceso a la vivienda digna, habilidades para el acceso y mantenimiento del empleo, privaciones en los aspectos culturales y educativos y otras dificultades por factores ambientales.
También unidades convivenciales, principalmente familias en riesgo, entendiendo a aquellas que tienen menores a su cargo y que requieren de una intervención psicosocial y educativa con ayuda profesional para hacer frente a las limitaciones, dificultades o conflictos que presentan, así como la necesidad de dotarlas de habilidades y actitudes que faciliten el desarrollo personal de cada uno de sus miembros y adquieran la capacidad y autonomía personal para desarrollar los procesos de socialización adecuados al entorno social en el que viven.
En este sentido, la atención integral que se presta a las personas y unidades convivenciales requiere que las profesionales de los ETIS mantengan coordinaciones continuadas con los diferentes recursos existentes en la capital gestionados por la administración pública y/o entidades colaboradoras y empresas privadas, abordando así los distintos ámbitos de la intervención integral, como a nivel de educación, salud, formación y empleo, vivienda, participación comunitaria y relaciones familiares.